Frontiers Music s.r.l. 4 August 2017
Tracklist:
1.- The new norm
2.- Where we´re going
3.- Pandora´s box
4.- On target on time
5.- Gone all the way
6.- Unify
7.- For the fallen
8.- Life force
9.- Same old song
10.- Again
Band:
Billy Sherwood - bajo y voz principal
Bruce Gowdy - guitarras
Guy Allison - teclados
Mark T. Williams - batería
For progressive fans of Yes and Toto
For progressive fans of Yes and Toto
Tercer álbum de este supercombo que presenta como alma mater al gran Billy Sherwood (Yes, Asia) al que se unen Guy Allison y Bruce Gowdy (ambos de Unruly Child) y a Mark T. Wiiliams a la batería (hijo del compositor John Williams y hermano del cantante de Toto Joseph Williams).
Doy fe que habían llegado a mis ojos noticias sobre ellos pero no me había detenido a escudriñarlos lo suficiente, así que es hora de corregir mi error con este álbum.
Con esos acordes sinfónicos comienza “The new norm” en donde el aliento a lo Toto se respira a lo largo del tema con sus coros llevando el eje casi principal y el teclado absorbiendo la totalidad del minutaje con sus idas y venidas que dan esa esencia tan pomposa al tema. Buen inicio aunque me quedo con ganas de rematarlo de forma definitiva con un buen estribillo.
En una onda parecida continúan con “Where we´re going” en donde el sinfonismo reina por toda la estancia con un teclado que en el pre-estribillo me rechina un poco aunque sea típico de hacer las cosas así no me acostumbro que un tema tan excelso en arreglos y minutaje lleve este tipo de elementos discordantes. Por el resto ningún pero que poner ya que hay que escucharlo varias veces para poder apreciar su profundidad y el montón de cambios que presenta.
Llegamos a “Pandoras box” y como si abriéramos la dichosa caja, el tema fluctúa cual montaña rusa en partes algo más “movidas” y accesibles a la mayor parte del público mientras en otras la “calma” llega a nuestras vidas y descansamos a la par que tomamos un refrigerio. Hay que disfrutarlo sin buscarle más vueltas ya que es un tema menos enrevesado que se disfruta sin más pretensiones.
“On target time” ya se me hace más “fácil” de escuchar y es que hay momentos donde te saturas de arreglos y buscas un tema “sencillo” donde poder descansar tus tímpanos con el fin de luego poder apreciar la tormenta musical que se nos avecina. Un tema bastante tranquilo que paladear a la par que de bella ejecución.
En el parque de atracciones nos montamos en el siguiente vagón llamado “Gone all the way” que toma el control inexorable de nuestro destino y nos hace ascender con una velocidad ínfima mientras charlamos con nuestro vecino de vagón y vemos a los alegres pájaros revolotear a nuestro alrededor. Pero tras ello comenzamos una vertiginosa caída que nos lleva a notar un cúmulo de sensaciones diversas en nuestro estómago que desaparecen al llegar a un túnel y cerrar los ojos para poder asimilar lo vivido y lograr equilibrar nuestra respiración de nuevo a la par que observamos que ese va a ser nuestro discurrir a lo largo de esta atracción en cuanto vemos la claridad. Un tema grandioso que hay que dejarse llevar y oírlo varias veces para poder descubrir lo que nos ofrece.
No sabemos a dónde ir ahora y mientras nos llega de fondo el tema que da nombre al álbum “Unify” donde ese teclado me maravilla a la par que los coros me envuelven cual cañón de humo de alguno de los conciertos a los que asistimos y dónde nos dejamos llevar y sorprender a ciegas hacia el sitio que nos llevan. El tema está muy bien y os recomiendo que le otorguéis una oportunidad al igual que al resto del disco.
“For the fallen” es de esos temas que te acompañan en el camino dándote conversación pero sin aportarte nada a tu vida más que el mero hecho de intentar que no estés sólo y siempre lleves a alguien a tu lado para evitar ese estado.
Todo lo contrario es “Life Force” ya que aquí entra el efecto Toto en su esplendor, dotándolo de esa garra en estrofas que nos aporta ese caudal de energía necesario para sobrellevar cada día desde que nos levantamos y que necesitamos para poder aportar un plus de más a esta sociedad que nos intenta asfixiar día tras día. Un tema alegre a la par que lleno de emotividad y positividad.
“Same old song” o cómo volver a la era de la psicodelia en su grado máximo, parece que tenemos que estar fumados del todo para poder saborear este tema porque no le encuentro ni pies ni cabeza por más vueltas que le he dado. Acaba y tengo la sensación que me han dado la vuelta a lada lóbulo cerebral.
Cierran con “Again” para poder redimirse del tema anterior y dar un toque más sofisticado, alejándose de las comeduras de tarro y simplemente dejándose llevar por el ritmo que manda la canción con alguna floritura como añadido pero sin más espectacularidad que ofrecer.
En resumen; un disco al que se debe de dar una oportunidad aunque no seáis amantes del estilo porque siempre hay que ser abiertos de mente e intentar aprender de músicos que han participado en infinidad de proyectos y tocado con los grandes grupos que han marcado, de una u otra manera, nuestras vidas. Un disco que no es de fácil deglución pero que cuando lo “entiendes” te sacia lo suficiente o un poquito menos pero sin llegar a los extremos de sufrir pesadez.
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AORLAND SCORE: 77/100
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