Out: 20.05.2016
Genre: Melodic Hard Rock
Track listing:
1. HEAD OVER HEELS
2. A PIECE OF THE ACTION
3. FIREWORK
4. HURRICANE
5. I STAND BY YOU
6. ROCK THIS HOUSE
7. ANGEL IN MY ROOM
8.SOMEONE TO LOVE
9. TURNED TO STONE
10. HEAVEN
11. SAIL AWAY
The band
Christian Eriksson – Lead Vocals
Joachim Nordlund – Electic and Acoustic Guitars, bass, Lead and Background vocals
Mats Gesar – Guitars
Johan Lindstedt – Drums
Fredrik Plahn – Keyboards and background vocals
By Manuel Garcia
Mucha gente conoce mi debilidad por las bandas y solistas escandinavos ( más concretamente por los suecos) , es por ello que cuando llegó a mis manos este adelanto una gran sonrisa se dibujó en mi boca ya que allá por el verano de 2013 (sé que no ha pasado tanto tiempo pero devoramos tanta cantidad de música que parece que hayan pasado bastantes más años) el guitarrista Joachim Nordlund y el batería Johan Lindstedt, ambos pertenecientes a la banda Astral Doors, se unen al cantante Christian Hedgren (The theander expression) y publican 2 canciones en las redes sociales que auguraban un gran porvenir cómo quedó demostrado en su “Rock your world”, fantástico disco mezclado por Erik Mårtensson (Eclipse) , que también lo hace en éste, y que pasó más desapercibido de lo que debería; y es que contenía todo un compendio de lo que debe ser el hard rock en estado puro.
Es por ello que me senté en el sillón de descanso con una cerveza fresquita a mi lado y me dispuse a trasladarme de este mundo a aquel lugar en el que los problemas cotidianos se olvidan y mi cuerpo comienza a segregar endorfinas a borbotones, a la par que mi falange se deslizaba hacia el icono del play que resaltaba en el Ipod y sonaban los primeros acordes de “Head over heels” , tema con un deje brutal a Eclipse, como se nota la mano de Erik, plagado de coros y que nos recuerdan a muchísimos temas que hemos mamado desde hace años ya, mucho ojo a ese teclado brutalmente bien metido a la hora del estribillo y al trabajo a las guitarras. Tremendo comienzo para empezar el disco que hace que tenga ganas de oir “A piece of the action” con el que continúan y que se me asemeja un montón a temas de otro no menos maravilloso disco que fue el de Marcello/Vestry; que la fiesta no decaiga con trallazos como éste y cómo “Firework” con el que siguen la senda del anterior y no dejan que nuestras piernas dejen de golpear el suelo de manera enfermiza, la batería y la guitarra nos vuelven a dar toda una lección de cómo se debe de hacer una buena mayonesa evitando que se corte durante su elaboración.
Los 80 siguen cada día más presentes y canciones cómo “Hurricane” nos lo demuestran, single potencial que si a alguien no le gusta es para que directamente vaya al médico y se quede ingresado de por vida allí, perfectos teclados, coros, estribillo, etc. Vamos todo lo que un gran tema de AOR o Hard rock (llamadlo cómo os venga en gana) nos hace disfrutar que es lo que realmente importa. Vamos a tomarnos un descanso merecido ante tanta vorágine y para ello nos deleitamos con “I stand by you”, ese medio tiempo que no debe faltar en ningún disco y que está perfectamente colocada ya que el disco se ha iniciado de una manera descomunal y aguantar a ese ritmo es imposible por lo que un poco de relax siempre viene bien y más si se acompaña de buenos manjares cómo este tema. “Rock this house”; en todos los temas la intro que tienen es un coro que te aventura cómo va a ser el estribillo y éste no va a ser menos; de nuevo tema que nos hace volver a danzar cómo posesos y nos invita a subir el volumen de nuestro reproductor y es que lo tengo ya al 70% de su capacidad y no sé si va a sobrevivir ante tan magnífica interpretación y con un sólo que me pone los pelos cómo escarpias; no me cansaré de decir que el trabajo en guitarras y batería es descomunal y la masterización es de otro mundo, vamos en lo que va de año ningún disco ha sonado cómo este.
La verdad es que “Angel in my room” es una canción un poco mentirosa ya que comienza a una velocidad aplastante, como una manada de gacelas corriendo por la sabana mientras son perseguidas por el rey de la selva, pero en el puente y el estribillo decae para dar lugar a un soplido de aire en el cogote que nos hace descubrir placeres ocultos que nuestra memoria no recordaba dónde los habíamos dejado; es este cúmulo de sensaciones las que marcan que un tema nos encante.
“Someone to love” es otro medio tiempo dónde la predominancia del teclado nos conduce por un sendero agradable en dónde, esta vez, la guitarra no cabalga cómo en los anteriores excepto en el súper-sólo que nos hace en cada tema, es increíble lo de Joachim y el acompañamiento de Johan (creo que en cada concierto debe de usar 3 docenas de baquetas al menos), por no hablar de los coros que son el santo y seña de todo el disco.
Vamos llegando a la recta final y “Turned to Stone” nos presenta un tema que perfectamente puede estar incluido en cualquier película de aventuras que se precie, perfecta interpretación vocal asentada sobre un colchón de teclados fantásticos. Llegamos a nuestro cielo particular con “Heaven”, dónde subimos un poco el ritmo pero sin llegar a la velocidad de los primeros temas y es que se va notando ya que la descarga ha sido tan increíble que merecemos relajarnos un poco antes de rematar el disco con “Sail away”, balada perfecta para hacer que nuestro barco parta a los distintos continentes para dar a conocer este fenomenal trabajo.
En resumen no sé quien dijo que segundas partes nunca fueron buenas porque, para mí, este disco es tan bueno o más que el anterior y demuestra que cuando hay ganas y se tienen los mimbres adecuados se pueden hacer obras tan impresionantes cómo lo que nuestros oídos han disfrutado.
No lo debéis dejar pasar ya que es un disco fresco, fiestero y muy bien hecho tanto instrumental, vocal cómo en las mezclas.
Muy Recomendable
Highly recommended
Aorland Score: 95/100
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